Por qué tus hijos deben trabajar mientras estudian

Hace treinta años se creía que los jóvenes debían dedicarse solamente a estudiar y que el trabajo llegaría una vez que terminaran sus estudios. Los tiempos han cambiado y hoy las necesidades son mayores.

Emma E. Sánchez

Hace cincuenta años, estudiar era para muchos un gran privilegio. Solo algunos podían hacerlo, y el resto debía trabajar para el sostén propio y de la familia. Estudiar era la única manera de lograr un cambio radical en la forma de vida de las personas. Por ello, se consideraba algo tan valioso e importante que muchos se sacrificaban para que por lo menos a un integrante de la familia fuera a la escuela, quien, por cierto, también debía esforzarse y trabajar.

Los hijos de esa generación, los que lograron salir adelante, supieron lo que significa el esfuerzo y el sacrificio. Aprendieron a valorarlo todo porque nunca tuvieron lujos y las cosas de la vida diaria no las obtuvieron sin antes esforzarse mucho. Pero, cuando se convirtieron en padres, cometieron dos errores:

  1. Dar a sus hijos todo lo que ellos no pudieron tener y disfrutar cuando fueron niños.

  2. Se esforzaron y se sacrificaron para que los hijos pudieran ir a la escuela y dedicarse únicamente a estudiar, sin preocuparse por algo más.

Y los hijos de esa generación, los jóvenes y adolescentes de estos días, no saben valorar las cosas, pues sin necesitarlas o desearlas, ya las tienen. Nunca han experimentado el esfuerzo y sacrificio por otros y rara vez han tenido que esforzarse: todo les ha sido dado, y de sobra. Estudiar es ahora más una oportunidad de socializar con otros jóvenes de su edad, que una oportunidad para cambiar y mejorar sus vidas futuras como adultos. Los padres siguen resolviéndoles todos sus asuntos y, efectivamente, solo se dedican a estudiar. El mayor de los conflictos llega cuando al terminar sus estudios, no quieren trabajar o no encuentran trabajo y se dedican a todo menos a tener vidas productivas. Así, el periodo de adolescencia se prolonga hasta casi los treinta años. ¿Puedes creerlo?

Advertisement

Pero hay jóvenes que son radicalmente diferentes: los que tienen metas, practican un deporte, se divierten sanamente, cursan sus estudios y trabajan, ¡esa es la clave!

Por qué tus hijos deben trabajar mientras estudian

Hoy en día ya son más las universidades que fomentan y apoyan al estudiante que trabaja, pues está más que comprobado que los muchachos que estudian el nivel superior universitario y trabajan medio tiempo, tienen muchas más oportunidades de sobresalir en los estudios y obtener mejores trabajos una vez que los concluyen. ¿Sabes por qué? Simplemente porque ya tienen experiencia laboral y han tenido tiempo de desarrollar habilidades laborales, a diferencia de sus compañeros que solo se dedican a estudiar. ¿Cuáles son esas habilidades y valores que desarrolla un estudiante que trabaja? Aquí tienes algunas:

1. Son jóvenes más independientes

Sus padres ya no tienen que llevarlos y traerlos, arreglan sus propios asuntos y saben salir adelante de las dificultades que la vida les presenta.

2. Son más seguros

Toman decisiones correctas y más rápidamente, pues confían en sus capacidades. Han aprendido a hablar con desconocidos, a tratar con diferentes tipos de personas que no están dispuestos a ser amables o considerados con ellos. Aprenden a defenderse, argumentar y aceptan responsabilidades.

3. Maduran

En el trabajo ya nadie los trata como niños, ni hay papá o mamá que les lleve el desayuno o los defiendan de los demás. Los jefes y patrones ya no tienen miramientos o consideraciones y, lo mejor de todo: los tratan como adultos y como tales deben responder.

Advertisement

4. Se disciplinan

Se levantan temprano, usan agenda y aprenden a manejar mejor su tiempo. Reducen sus ratos frente al televisor o con los amigos, y ya no tienen tiempo que perder en las redes sociales, pues ahora hay que estudiar y hacer tareas. También aprender el valor y la administración del dinero.

5. Ejercen su liderazgo

Sus circunstancias les preparan para ser líderes y tienen mayor oportunidad de aplicar los conocimientos teóricos que aprenden en las escuelas, sobre la realidad cotidiana.

Trabajar y estudiar no es fácil. Habrá días muy complicados y veladas largas estudiando. Comidas saltadas y con frecuencia cansancio, pero la juventud puede con eso y más. Y si detrás de ese joven trabajador hay padres que le sepan guiar y apoyar, exigir y motivar, los resultados serán maravillosos, créelo. La vida y estos tiempos son más exigentes, tu hijo debe estar listo para afrontarlos, especialmente cuando tú ya no estés.

Si quieres saber cómo enseñar a tus hijos a ser independientes desde que son pequeños,

O, relacionado con el tema, también puedes

Advertisement

.

Toma un momento para compartir ...

Emma E. Sánchez

Pedagoga y Terapista familiar y de pareja. Casada y madre de tres hijas adultas. Enamorada de la Educación y la Literatura. Escribir sobre los temas familiares para ayudar a otros es mi mejor experiencia de vida.