Espejito, espejito: el secreto de las mujeres bellas
Algo dentro de ti grita que eres atractiva. Aprende a mirarte nuevamente: eres única y especial.
Marta Martínez Aguirre
Quién no quisiera tener el espejito de la reina de Blanca Nieves y verse atractiva cada mañana. Te confieso que en mi familia materna la silueta fina quedó impresa en las fotografías hasta que nació el primer hijo; en la familia paterna, ser demasiado altos era también un problema.
Delgada, rubia, de pelo lacio o suavemente ondulado, parece ser el ideal de las pasarelas, pero en la vida real abundan los kilos de más, las arrugas, las canas y la flacidez, sin tener en cuenta las estrías y la miopía.
A quién no le gusta verse bien. Apuesto a que tu baño es un verdadero supermercado: tienes shampoo para rizar el pelo, para dejarlo lacio, crema de enjuague con aguacate (palta), cremas para los granitos, talco para los pies y el parche para los kilos que se salen sin permiso de tu blusa. Sin embargo, algo dentro de ti, grita que eres atractiva.
¿Cómo puedo afirmar esto si me dices que tienes mil características que rechazas y te hacen sentir tan mal?
1. Hay que redefinir belleza
Si haces una encuesta sobre el ideal de belleza, verás que hay tantas opiniones como personas encuestadas. En otros tiempos, las gorditas eran la perdición de los hombres, y en otras culturas -por ejemplo, en la tribu Karen de Tailandia-, las mujeres alargan sus cuellos artificialmente con anillos dorados: cuanto más largo es el cuello de una mujer, más bella es. Si alguna de ellas quiere quitarse el collar, fallece en el acto, ya que sus vértebras están rotas por alargar artificialmente el cuello.
La belleza debes buscar dentro de ti, pero también en tu exterior: quizás tus cejas, el color de tus ojos o quién sabe qué rasgo te hace bella y única, entre miles de mujeres. No mires tus imperfecciones como tu totalidad, son solo un rasgo que debes aceptar.
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2. La anatomía y los genes
Es imposible que quieras lucir como las modelos si tu genética familiar grita por todos lados que hay una gran tendencia a ser pequeña y con sobrepeso. De modo que lo que puedes hacer es cuidar de tu físico, tener hábitos saludables a la hora de alimentarte y no compararte con los símbolos de belleza que promueve la sociedad.
3. Van a valorarte por lo que eres, no por la máscara
Mi madre decía que “siempre existe un roto para un descosido”. Este dicho popular, además de hacerme reír, me hizo meditar muchas veces. Si alguien se fija en ti, es porque algo le agradas y esa persona valora algo que tú no ves. Cuando alguien dice que le gustas, es porque para sus cánones de belleza ha encontrado un rasgo, un aspecto que te hace atractiva y que te genera un aire especial.
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4. Ellas siguen siendo atractivas
¿Te has puesto a buscar en Internet fotos de mujeres que en otro tiempo fueron un sex symbol? Mira, hazlo: es una terapia al corazón. Ellas, con arrugas, sin maquillaje y con ropa deportiva siguen siendo bellas, porque los años han dejado huellas del tiempo, pero sus almas siguen tan frescas como antes. Eso mismo pasará contigo, aprende a descubrir tus atributos, que seguirán contigo hasta la tumba. Ese porte cuando luces ese trajecito, esa mirada que impacta, ese pelo que luce sedoso y bello, son atributos únicos que te dan ese aire encantador aún con tus pies planos y tu dolor de columna. Te dejo este video que es más elocuente que mis palabras.
Aprende a valorarte, mírate en el espejo y descubre lo que te hace encantadora, sexy, dulce. Ahora, sal al mundo a iluminarlo.
Marta Martínez Aguirre
Marta Martínez es de Uruguay. Posee una licenciatura en Psicología, y un posgrado en Logoterapia. Ama todo lo que hace y adora servir. Es especialista en atención psicológica domiciliaria. Contacto:
