¿Amas demasiado a tus hijos? Conoce las TERRIBLES consecuencias
El amor en exceso genera consecuencias terribles para los hijos en su edad adulta. Aprende cómo criarlos con amor y cariño
Adriana Acosta Bujan
Algunas personas piensan que no son amados por alguno de sus padres, ya sea porque en su infancia fueron abandonados o sintieron algun tipo de rechazo, sin embargo, siempre he creído que todos los padres aman a sus hijos, solo que lo hacen de maneras diferentes, puesto que todos seguimos un patrón aprendido desde la infancia y es la guía fundamental para demostrar amor.
En el libro “Padres aman demasiado“, de los autores Jane Nelson y Cheryl Edwin, aseguran que los padres hacen todo lo posible para criar de la mejor manera a sus hijos, sin embargo, como todos los seres humanos solemos cometer errores, sobre todo cuando el amor es en exceso.
La palabra amor
¡Amor! Es una palabra que crea un vínculo entre padres e hijos, pero puede tener muchos significados diferentes, algunas veces se demuestra amor con el contacto físico como los abrazos, besos, caricias y verbalmente con palabras y acciones cariñosas. Pero también se ama cuando los padres son estrictos, cuando no tienen contacto físico, incluso cuando ni si quiera suelen preguntar al niño ¿cómo le fue o se siente?, con tal de que ellos tengan todo lo que necesitan, algunos padres creen que es la manera de demostrar su cariño.
Está comprobado
Amar a los hijos en exceso afecta el desarrollo emocional, el problema no es amar, sino que al sobreproteger no se fomenta la autonomía emocional ni personal.
Sobreprotección
La doctora Roxana Palacios, asegura que lo que los padres se aferran a crear un escenario poco realista de la vida cotidiana, para evitar que los hijos experimenten situaciones negativas y sufran. Los padres intentan controlar de un modo excesivo los deseos y preferencias de los hijos, restándoles independencia, incapacitándolos a tomar riesgos, que cometan errores y de una u otra manera no aprenden.
Consecuencias: niños tímidos, nerviosos, inseguros, temerosos, dudan de sus capacidades y habilidades, bajo amor propio, dificultad para tomar decisiones, búsqueda de seguridad en otras personas, baja tolerancia y frustración, además dificultades en el aprendizaje.
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Lo que debes aprender
1. Controla tus sentimientos
Deja de culparte si tu hijo sufre, deja de trasmitir tus miedos o inseguridades, te recomiendo dejar que tu hijo aprenda de sus errores y tome decisiones a pesar de su corta edad. Comienza a delegar responsabilidades conforme a su edad, así lograrás que tu hijo tenga confianza y seguridad.
2. No decidir por los hijos
Nunca hay de menospreciar las capacidades e inteligencia de los hijos, aunque sean pequeños. Recordemos que todos aprendemos de nuestros propios errores y experiencias. Trata de trasmitir una atmosfera de apoyo y cariño, siempre bajo tu vigilancia; brinda libertad para que ellos logren tomar sus propias decisiones sean correctas o no.
3. No los rescates
Si los padres suelen ir al rescate de sus hijos todo el tiempo, evitando que ellos sufran ya sea física o emocionalmente, los hijos se volverán poco responsables, incluso harán cualquier cosa para llamar la atención exagerando las situaciones. Ten mucho cuidado y valora los riesgos o peligros reales que puede exponerse.
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4. Controla los permisos
El otro lado de la moneda, es que algunos padres dan permiso a sus hijos para hacer todo lo que desean, es una manera de demostrar su amor, sin embargo, la educación y disciplina pueden salirse de control, haciendo niños consentidos, egoístas y poco empáticos con los demás. Refuerza los límites y no dejes de delegar responsabilidades.
5. Control excesivo
Es el otro lado opuesto de la permisividad, cuando los padres le prohíben a los hijos hacer lo que desean y son muy estrictos en sus reglas, lo que provocarán es que los hijos, tengan poca confianza hacia los padres, guardaran secretos y al final se las ingeniaran para hacer lo que quieran sin medir las consecuencias y riesgos.
6. Pocos lujos y más esfuerzo
Una manera de demostrar amor a los hijos, es darles todo lo que ellos quieran, llenarlos de lujos, juguetes costosos, viajes, comidas etc. Sin embargo, se debe establecer un límite, puesto que en un futuro serán personas egoístas y poco responsables, ya que no valorarán el esfuerzo para conseguir cosas materiales. Enseña a tus hijos a esforzarse por lo que quieren, el trabajo constante, hará de ellos personas independientes.
Amar en exceso es perjudicial para los hijos, encuentra un punto de equilibrio al demostrar tu amor, para que ellos no sufran las terribles consecuencias.