¿En manos de una mujer manipuladora? Descubre si esto es lo que está sucediendo al lado de tu pareja
Las mujeres son expertas en manipular a sus parejas, descubre como lo hacen y termina de raíz ese comportamiento oportunista y dañino.
Erika Otero Romero
No es secreto que muchas mujeres son sumamente caprichosas, tanto que para lograr lo que desean de sus parejas hacen lo que sea que este en sus manos para alcanzarlo, a veces con éxito. La actitud no es que sea loable, ¿Quién quiere ser llevado de una manera un tanto licenciosa a hacer la voluntad de alguien más?, seguro que si te llagas a dar cuenta de que eres “víctima” de manipulación, la situación no terminará nada bien.
Pues bien, con lo anterior dicho, acá tienes un compilado de 6 maneras que tienen las mujeres de manipular a los hombres.
1. Tratarlos como si fueran inútiles
Esta actitud se ve mucho cuando la mujer desea que el hombre dependa de ella para todo y se sienta incapaz de dejarla ir. Es una forma de mantenerlo a su lado.
En lo que incurren es en no permitir que haga nada en casa, si se ofrece a lavar la ropa, a hacer la cena, a arreglar la casa o lo que sea la mujer siempre le dirá: “no amor deja ahí que debes estar muy cansado, yo puedo hacerlo sola”.
Por lo general también dicen a sus amigas ” ¡ay! Es que el pobre no sabe ni freírse un trozo de carne. No es que él no sepa hacerlo, es que el deseo intrínseco aunque le cueste reconocerlo, es hacer sentir a su pareja que depende de ella, que lejos de ella no será capaz de hacer nada por si mismo.
Se da, no todas las mujeres lo hacen, a muchas más les encanta que su pareja se ponga manos a la obra en el hogar, pero muchas otras lo impiden con el fin de someter a su esposo.
2. Coquetean con otros para provocar celos
Es probable que sienta que no tiene la atención que ella quiere de parte de su pareja o no se siente muy valorada. Es más, puede que surja cuando una discusión haya brotado entre ellos.
El punto es que desea medir que tanto le ama su pareja y para ello coquetea con otros. ¿Inmaduro? Quizás, ¿cruel? Para ser honesta no sé qué tanto puede serlo, pero que surte efecto en ocasiones, sí que sí, el asunto es que es muy evidente y el hombre tiene que ser muy miope para no darse cuenta de la intención.
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3. Prueban a sus hombres
Supón que su pareja ha decidido salir con sus amigos, pese a ello, ella llamará para “hacerle” cambiar de planes sin una razón aparente. Si nota un poco de resistencia de parte de su esposo o novio usará el “si me amaras harías tal cosa”. Lo que ella pretende es que le demuestre que tanto le ama, para ella si su pareja la ama DEBERÍA dejar tu plan para ir a verla. No pasa desapercibido que es una prueba y de las más feroces que existen.
4. Jugando con la intimidad
Es bien conocido que para la mayoría de los hombre, las relaciones íntimas son como el pan de cada día: no pueden vivir sin el. Y las mujeres lo saben, por ello usan el sexo como arma para castigarlos o premiarlos según su gusto. Así que si, convierten una expresión del amor que se tiene la pareja en la manera de lograr un objetivo.
5. Usan la violencia psicológica
Muchas mujeres aprovechan el hecho de que saben que su pareja jamás levantará una mano para agredirlas. Con ello, aprovechan para llamarles por palabras hirientes como: “cobarde”, “débil”, “patético” y lo que sea para ofenderlo. Saben además que rara vez él irá a contarlo a alguien y se valdrán de eso para seguir aprovechándose de él.
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6. Manipulación emocional
Algunos hombres se conmueven con el llanto femenino, y muchas recurren a este para sacar ventaja y así conseguir lo que sea que se propongan. Cuando el hombre no cede de manera fácil a su llanto, les acusan de ser insensibles e incomprensivos. Para ser franca no sé qué tanto los hombres ya no sepan que esto es solo una artimaña. Pocos quizás caigan, pero otros ya saben de sobre de qué se trata y no caerán tan fácilmente.
Hay sin número de formas en que las mujeres buscan lograr algo de sus parejas; aun así, eso no garantiza que se vaya a lograr el objetivo, lo que si es cierto es que hay formas bastante asertivas de lograr que un hombre caiga en les redes femeninas, no son crueles y menos manipuladoras, pero de ello ya se hará otro artículo.
Erika Otero Romero
Psicóloga con experiencia en trabajo con comunidades, niños y adolescentes en riesgo.
