Los abuelos todavía tienen mucho que ofrecer

Dale a tus abuelos una oportunidad para mostrarte de qué está hecha la vida.

Arturo Leonardo

En las culturas antiguas, la vejez estaba considerada como un premio: ser viejo significaba respeto, honor y mucho conocimiento. Sin embargo, hoy en día cada vez es más común encontrar a personas mayores en el abandono total; seres humanos que alguna vez lo dieron todo y ahora están en el olvido.

El error de pensar en la gente mayor como humanos “acabados”, es sin duda un cáncer que se tiene que erradicar y la mejor solución es combatirlo desde la niñez; los pequeños deben crecer con la mentalidad de que no hay nadie más sabio que sus abuelos, y eso es gracias a su experiencia.

Golpe de experiencia del señor Nicklaus

Es precisamente la experiencia lo que presumió el señor Jack Nicklaus, el máximo ganador de “majors” en el Golf profesional. Nicklaus, quien se retiró hace 10 años, realizó una presentación especial en los campos del torneo Pro-3 (una “probadita” del Masters de Augusta) y lo que hizo Nicklaus dejó a una gran parte del público con la boca abierta.

Jack Nicklaus, con pantalón oscuro y playera amarilla, pidió uno de sus clásicos palos, se acomodó a modo de pegarle con mayor fuerza a la pelota con su brazo derecho y se tomó unos segundos para concentrarse a fondo. Entonces Nicklaus hizo lo mismo a lo que se dedicó por más de 40 años: un golpe soberbio que mandó la pelota directo al green. El efecto del golpe provocó un hoyo en uno, una exhibición tremenda del ex campeón que dejó en claro que la edad hay que respetarla.

5 consejos para hacer sentir mejor a la gente mayor

1. Salúdalos

Es la llave que abre casi cualquier puerta. Hazles saber que están ahí, quizá ellos ya no lo sientan así.

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2. Pregúntales cómo se sienten

Y esta aplica para todas las edades: en muchas ocasiones, se pasa por alto algo tan sencillo como mostrar cierta preocupación por la salud de alguien, o al menos por cómo le va en el día a día.

3. Déjales hablar

Tal vez ya te sepas ese chiste, porque lo ha contado 30 veces en el último mes, o igual ya te aburre la misma historia de cómo consiguió un sombrero verde. Pero son sus historias, su aportación al mundo, déjalo que las atesore y que haga que perduren, contándotelas.

4. Tómales de las manos

Esas manos tienen miles de historias. Pregúntate cómo habrán sido antes y qué habrán hecho para terminar a como las tiene. Acarícialas mientras le dices lo bien que sienten.

5. Pregunta lo que quieras

¿En qué lugares ha vivido? ¿Cuánto le costó tener esa casa dónde vive? Si es fanático de los deportes, aprovéchalo y pregunta cómo era tal equipo hace 30 años.

No hay que esperar una enfermedad o la terrible visita a un hospital para recordar las hazañas de la gente mayor que tenemos cerca. Así como a Jack Nicklaus y su hoyo en uno a los 75 años, hay que darles a nuestros abuelos una oportunidad para que nos sorprendan, que de eso está hecha la vida.

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Arturo Leonardo

Comunicador fanático de sus hijos a quienes les relata día a día sus aventuras de música y deportes, gusta de leer lo que se cruce en su camino, piensa que el acto más revolucionario que puede existir es el de reír.