Médico descubre que el 97% de los pacientes que han sido diagnosticados con cáncer han tenido este procedimiento dental
En la salud oral es "mejor prevenir que lamentar"
Erika Otero Romero
Yo tendría unos 11 años cuando por un accidente dental el lado derecho de mi cara comenzó a inflamarse y el dolor era increíble. Como era de esperarse, me llevaron al odontólogo y el resultado es que debía someterme a un tratamiento de nombre endodoncia o mejor conocido como tratamiento de conducto, el más horrible procedimiento médico que alguna vez alguien me hubiera practicado.
Es muy probable que tú o alguien de tu familia alguna vez haya tenido que pasar por este tipo de tratamiento, pues si es así entonces te interesará la información que voy a compartir a continuación.
¿En qué consiste una endodoncia o tratamiento de conducto?
Según el sitio clinicarais, una endodoncia consiste en un tratamiento que busca erradicar lesiones de la pulpa dental (nervio). Este es el tejido blando que existe al interior de los dientes que contiene tanto nervios como pequeños vasos sanguíneos.
Lo que se busca cuando se práctica una endodoncia es sacar el tejido dañado o “muerto” para que no genere infecciones bucales por acumulación de bacterias.
Se supone que debe ser indoloro y su realización, cuando es llevada a cabo por un buen profesional, no tarda más de 2 o 3 sesiones.
Hasta ahí no hay ningún problema, sin embargo, hace poco se compartió por internet una serie de investigaciones realizadas por un médico odontólogo del siglo 19 de nombre Weston A Price.
En qué consistieron sus investigaciones
Weston Priceera un reconocido odontólogo Estadounidense que dedico parte de su vida a realizar una serie de estudios sobre la relación que existía entre la endodoncia y las enfermedades sistémicas. Estas investigaciones recibieron el nombre de teoría de la infección focal.
A pesar de la importancia de sus estudios, esta teoría fue desestimada en 1930 y dejada en el olvido dentro del área de la odontología.
¿De qué se trata la teoría de la infección focal?
El portal theheartysoul expone que esta teoría evidencia que un diente “muerto” es una cuna para bacterias que pueden y afectan el organismo después de un tiempo de realizado el procedimiento.
Así, Weston A Price a través de un sin número de experimentos realizados en animales y observaciones a sus pacientes, logró demostrar de manera reiterada que a la larga este tratamiento provocaba en quien se lo había practicado, enfermedades de tipo cardiovascular y en el sistema circulatorio y otra serie de males degenerativos.
Detractores de sus estudios
En vista de que el doctor Price estaba echando por tierra el tratamiento por excelencia para “curar dientes”, la Asociación Americana de Dentistas hecho por tierra sus estudios y descubrimientos, ocultado así para el mundo de la medicina los devastadores resultados de ese tratamiento.
No pongo en duda que quizás en ese entonces sus estudios hayan sido verídicos; sin embargo, la ciencia en todas las áreas ha avanzado y las condiciones higiénicas de hoy son superiores a las de 1800.
¿Cuál es la mejor manera de tener una buena salud oral?
Las revisiones orales deben comenzar desde muy temprana edad para así hacer que los niños se acostumbren a las visitas regulares y no tengan miedo al odontólogo. Una persona con menos miedo a visitar a su médico odontólogo podrá gozar de una buena salud oral y por lo tanto de una buena calidad de vida.
Los odontólogos sostienen una verdad indudable: el descuido del paciente así como cualquier tratamiento dental mal realizadopuede y va a ser dañino para el organismo y como resultado a futuro podrán llegar a aparecer males que se podrían complicar con el paso del tiempo.
Pese a eso, ellos garantizan a los pacientes que (dentro de su ética) su tratamiento dental será bien realizado y que no tendrá ninguna implicación nefasta para su salud, pero ellos deben poner de su parte.
Medicina Oral en los niños: ¿a qué edad los más pequeños de la casa deben comenzar ir al dentista?
El portal sanitas recomienda que actualmente se recomienda que los niños deben comenzar a ir al dentista durante su primer año de vida, luego de ello advierten que se debe hacer una revisión anual.
En esa primera visita, se revisara si existen caries del biberón, afecciones periodontales, alteraciones del crecimiento o de la posición de los dientes y se harán recomendaciones a los padres acerca de los cuidados para la salud oral del niño.
Pese a todo lo que se pueda decir de los tratamientos odontológicos y el terror que pueda causar las visitas al dentista, es de suma importancia el cuidado de los dientes ya que es por la boca por donde tienen acceso un sin número de enfermedades y es mejor no dar la oportunidad de un mal tratamiento médico que ponga en riesgo la salud de ningún miembro de la familia.
Erika Otero Romero
Psicóloga con experiencia en trabajo con comunidades, niños y adolescentes en riesgo.
