Que tu cuerpo hable bien de ti: combate la sudoración genital
No todos los olores son malos, de hecho, algunos son potentes estimulantes para la actividad íntima, así que tampoco se trata de no oler a nada, sino de sentirnos cómodos en nuestra piel y disfrutar nuestra vida sin complejos
Yordy Giraldo
Si algo nos tomamos muy en serio las mujeres es nuestra imagen. Y esto incluye, además del aspecto físico, nuestros aromas, y no hablo precisamente del perfume; me refiero específicamente a los olores que emanan de nuestro cuerpo y que no siempre dan cuenta del empeño que ponemos en la higiene personal.
Los olores -y sobre todo los malos olores- son una cuestión a la que no podemos escapar. En realidad, no siempre se trata de que seamos personas desaseadas. El tema es que nuestro cuerpo está lleno de glándulas sudoríparas que se ponen a trabajar por factores tan diversos como la actividad física, la temperatura exterior, el miedo, o diversos padecimientos como la hiperhidrosis, etcétera.
Y lo peor es que la cosa no acaba ahí, pues si bien el sudor como tal no tiene olor, son las bacterias que se desarrollan en esa humedad las responsables de hacernos oler de manera desagradable y, por supuesto, no nada más ellas, también la forma en que nos alimentamos, e incluso nuestra raza influye en nuestros aromas; loas personas de origen asiático, por ejemplo, sudan menos que los caucásicos o africanos.
Existen dos tipos de sudoración: la transpiración ecrina, que es más que nada agua y el sudor apocrino, que está presente en nuestra zona genital y axilas y que, por lo general, es desagradable y al que me voy a referir con la intención si no de erradicarlo, al menos de saber lidiar con él de tal manera que no nos afecte en nuestra vida personal.
¿Cómo combatir la sudoración del área genital?
Cambia con frecuencia tu ropa interior
Un buen baño siempre es efectivo para quitarnos el sudor de encima, la ropa limpia por supuesto es también importante, y renovarla cada tanto lo es aún más. Recuerda que los tejidos guardan aromas que no siempre logramos quitarles.
Desodorante genital
No los confundas con duchas vaginales; de hecho, estas últimas, según he leído, no son buenas, ya que pueden cambiar el PH de nuestra zona íntima y dañar las bacterias que nos son necesarias.
Ácido bórico
Pero no así solito, sino que debes mezclar dos cucharadas de la crema hidratante de tu preferencia -mientras más espesa mejor- con una cucharada de este compuesto químico que es, entre otras cosas, un antiséptico. Una vez que lo hayas hecho, ponla en el área o áreas a tratar y deja que se absorba.
Vitaminas de zinc
30 o 50 miligramos de zinc ayudan a que sudes menos de tus manos y pies, además de que puede ser de gran ayuda para que tus olores dejen de ser tan fuertes. Por supuesto, siempre, antes de ingerir cualquier medicamento, consúltalo con un médico.
Vinagre de manzana
Puedes diluirlo en agua si acaso tu piel es muy sensible o simplemente rociar una pequeña cantidad después del baño. La eficacia del vinagre radica en que reduce el PH y las bacterias no se desarrollan con PH bajo.
No creas que todos los olores son malos, de hecho los olores son de vital importancia incluso para nuestra reproducción, pues muchos son potentes estimulantes de la actividad íntima; así que tampoco se trata de no oler a nada, sino de sentirnos cómodos en nuestra piel y de disfrutar nuestra vida sin complejos.
