El cerebro de mujeres y hombres es distinto. ¿Cómo afecta eso tu relación?

La vida conyugal es una barca que lleva dos personas en medio de un mar tormentoso; si uno de los dos hace algún movimiento brusco, la barca se hundirá. León Tolstoy

Myrna del Carmen Flores

De alguna manera todos lo intuimos: los hombres y las mujeres reaccionamos de manera muy distinta ante una misma situación, salvo que ahora la ciencia lo ha confirmado. Científicos de la universidad de Pensilvania, en Estados Unidos, realizaron muchas pruebas de resonancia magnética que han comprobado que esa diferencia en realidad existe.

Con los resultados del estudio del funcionamiento los cerebros, tanto de varones como de mujeres, han llegado a la conclusión que los hombres tienen mejor conexión entre lo que perciben y su coordinación, mientras las mujeres tienen una mayor capacidad de análisis e intuición. Esto explicaría por qué a la mayoría de los hombres se les facilita estacionar un coche en un espacio pequeño, y a la mayoría de las mujeres notar cuando un hijo tiene problemas, aunque no lo verbalice.

Más allá de si el cerebro masculino es de mayor tamaño o las mujeres tenemos más materia gris, me interesa traducir esas diferencias a nuestra convivencia diaria, para lograr una mejor comunicación en la pareja.

1. Multitarea o concentración total

Sonia continúa preparando la cena mientras su esposo comienza a contarle algo que para él es importante, pero se molesta porque cree que ella no lo está escuchando.

En otro momento, Sonia es quien se enfada. Su esposo está viendo un juego de futbol, ella se acerca para pedirle ayuda con alguna tarea y él responde con un “Ajá”, al tiempo que asiente con la cabeza. Tiempo después la mujer nota que él no hizo lo que le pidió. Además, ni siquiera recuerda cuándo se lo pidió.

¿Te suena familiar? La realidad es que Sonia sí puede poner atención a la cena y a su esposo al mismo tiempo. Su esposo, no obstante, necesita desenfocarse del juego y escuchar a su mujer. Las mujeres tienen un mayor grosor del cuerpo calloso del cerebro, por lo que pueden hacer varias cosas a la vez, mientras que los hombres solo pueden enfocarse en una sola. Ambas capacidades se complementan, solo hay que entender las diferencias y actuar en consecuencia.

2. Orientación espacial o comunicación verbal

Adela y su marido transitan por calles desconocidas rumbo a una reunión en casa de unos amigos. Después de un tiempo de avanzar en círculos, ella desea bajar del coche y pedir información a algún transeúnte. Pero él continua manejando, seguro de que encontrará el lugar. Comienzan a discutir por lo que, al llegar a la fiesta, ya están molestos.

La realidad es que, por lo general, los hombres confían más en su capacidad de orientación que en su capacidad verbal, como lo hacemos las mujeres. Es cuestión de darle una oportunidad a ese hombre capaz; seguro encontrará la calle, y si no, siempre queda el recurso de utilizar la comunicación como ella lo sugiere.

3. Pensar demasiado y desahogarse, o dejar de pensar para resolver después

Teresa tuvo un problema con una amiga a la que quiere mucho. Le contó a Juan, su marido, todo lo sucedido. Él preguntó: “Pero, ¿qué puedo hacer?”

Juan se siente estresado, al escuchar el problema de su esposa intenta solucionarlo, porque está en su naturaleza. Pero él debería entender que, por el contrario, su mujer lo único que quiere es que la escuchen; sólo intenta desahogarse.

Al enfrentarse a un problema, los hombres buscan resolverlo o dejan de pensar en ello; las mujeres, sin embargo, piensan y hablan demasiado sobre el asunto. ¿Qué tienen que hacer ellos? Escuchar y apoyar. ¿Y ellas? Darle tiempo al hombre para dejar de pensar, y después considerar una solución.

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4. Intuición o claridad

Laura advirtió un día que su esposo llegó tenso después de una jornada de trabajo. Se acercó y, sin que él lo pidiera, le dio un masaje en los hombros para hacerlo sentir mejor. Días después ella llegó en las mismas condiciones pero él no lo notó. Por supuesto, esto le molestó, pero no dijo nada. Después de largo tiempo y preguntas mal respondidas, él notó que estaba enojada. Le preguntó qué sucedía, pero ella solo dijo: “Nada”. Después de todo, piensa ella, él debería adivinar lo que le pasa, de la misma manera que ella lo intuye siempre.

Lo más sencillo para una mujer sería aceptar la diferencia y decir lo que desea con claridad. Poco a poco él aprenderá cómo desea ella que él actúe en diferentes situaciones. Como lo dije antes, las mujeres son intuitivas, pero los hombres tienen dificultad para entender situaciones no explícitas.

5. Sexualidad

Según los científicos, los hombres piensan en sexo mucho más veces que las mujeres, mientras que las mujeres ligan su sexualidad, como casi todo, a sus emociones. ¿Cómo puede esa diferencia complementarnos?

Si un hombre desea que su esposa esté más dispuesta, entonces debe darle emociones, detalles, palabras hermosas, muchos “te amo”. Sí, ellas necesitan escucharlo, aunque lo sepan por tus actos, necesitan escucharte decirlo. Después de todo, ellas tienen más desarrollado el sentido del oído.

Si la mujer desea que todas las veces que su pareja piensa en sexo, solo piense en ella, entonces debería tomar la iniciativa con más frecuencia. Él necesita saber que lo deseas. Y no olvides que ellos son visuales, está en su cerebro.

Los hombres tienen más grandes las zonas del cerebro relacionadas con la sexualidad, que las mujeres. Pero esto no significa que las mujeres no lo disfruten de igual forma.

Entender las diferencias entre los hombres y las mujeres nos puede ayudar a relacionarnos mejor. Después de todo, un hombre adora ver a su mujer sonreír y una mujer sonríe cuando su hombre la entiende y la apoya.

Myrna del Carmen Flores

Myrna del Carmen Flores es maestra de inglés y madre de dos jóvenes. Puedes contactarla en