El matrimonio se crea a dos
Un matrimonio puede ser una obra de arte que los dos crean juntos si se siguen algunos sencillos pasos.
Denhi Chaney
Una verdadera pieza de arte precisa de muchos elementos, de conocimiento, de paciencia, y claro una dosis enorme de amor. A veces me resulta de beneficio pensar en mi matrimonio es como una pieza de arte exquisita que mi esposo y yo moldeamos con nuestras propias manos. Salvo que el matrimonio va cambiando con el tiempo y, conforme éste pasa, se crea algo único y especial —claro si esa es tu meta. Es un hecho que toda relación es producto de la creación de las personas que participan en ella.
A comparación de otras relaciones, la relación matrimonial es diferente pues es un poco más complicada; uno no se puede tomar vacaciones, ni poner solamente el 50% de nuestro mejor esfuerzo. Esta es muy parecida a la relación entre padres e hijos, pero la diferencia más importante es que a nuestros hijos los amamos pase lo que pase, mientras que a nuestro cónyuge lo podemos dejar de amar cuando dejamos de obrar para mantener una buena relación. A continuación te presento algunas ideas para crear algo verdaderamente excepcional.
1. Los mejores ingredientes para un matrimonio feliz
Si queremos crear o hacer algo especial nos tomamos nuestro tiempo en seleccionar los mejores ingredientes, y no los primeros que vemos disponibles. Tu matrimonio precisa de los mejores, aquellos que toman tiempo y no son baratos: amor, paciencia, compromiso, honestidad, perdón, confianza, vulnerabilidad, etcétera.
2. Una buena relación toma su tiempo
Con sus mínimas excepciones, todo aquello que vale la pena toma su tiempo. Es decir, si está hecho a mano la calidad se verá, pero no estará listo de la noche a la mañana. Es por eso, que la mayoría de los matrimonios que llevan mucho tiempo juntos te dirán que la relación es mejor ahora que en un principio pero que ha tomado todos esos años para llegar a esa calidad de relación y no sucedió en cuestión de meses.
3. El matrimonio debería durar para siempre
Alguna vez leí en algún lugar que una abuela le había dicho a su nieta que en su época si algo estaba roto simplemente lo componían y no consideraban tirarlo a la basura, es lo mismo con tu matrimonio; le dijo, si algo está roto lo compones y NO lo tiras a la basura. Esto tuvo un impacto en mí, pues es cierto en esta cultura en donde todo es desechable, podemos llegar a ver nuestra relación de la misma forma. Si tienes conflictos, tienes que verlos como algo que está roto y que necesita compón y no como una señal de que todo el matrimonio se debe tirar a la basura.
4. Que la obra maestra no sea de un solo autor
No es suficiente que solo uno esté dando el 110% mientras que el otro solo el 10%. Los dos tienen que estar dando LO MEJOR de sí; ojo, puse lo mejor de sí y eso no implica un 100% todo el tiempo. Por ejemplo, una de las situaciones más comunes es cuando hay un bebé nuevo en casa, por los primeros tres o cuatro meses la esposa puede que esté dando un 50% a la relación, y eso es lo mejor que puede hacer porque en ese momento este bebé le quita todo su tiempo y energía, pero mientras esté dando lo mejor de sí, y su pareja también, salen a flote de esta situación mejor de lo que estaban antes. Así que cuida que tu obra de arte no tenga solo un autor, sino que sea obra de ambos.
Un matrimonio que se cuida y se protege es una verdadera obra de arte, exquisita, única, especial y sí, eterna.