Deja que tus niños sean niños, 3 momentos clave de su infancia
Como todo dentro de la naturaleza, la infancia es parte de un proceso. La primera parte es descubrir el mundo, la segunda es aprender a funcionar en él, la tercera es salir a conquistarlo.
Yordy Giraldo
Por lo general, los chicos quieren ser grandes y los grandes añoran ser chicos. La mente nos juega trucos haciéndonos creer que ser adultos es tener permiso para hacer todo lo que queramos, y la verdad es que las responsabilidades dejan poco espacio para eso. Asimismo, creemos que ser niño es pasar el tiempo sin hacer nada, y tampoco es para tanto.
Lo cierto es que estar en los zapatos de alguien de cualquier edad tiene sus pros y sus contras. Lo importante es saber para qué sirve cada etapa de la vida y tratar de experimentar todas al máximo. Así, cuando lleguemos a la siguiente fase, habrá poco o nada de qué arrepentirnos y, lo más importante, tendremos las habilidades necesarias para superarla.
Muchos padres permiten y alientan que sus hijos “quemen” etapas. Eso puede tener implicaciones negativas en el desarrollo de los menores. Los bebés inician su alimentación ingiriendo líquidos porque no están preparados para masticar, y lo mismo sucede con el gateo versus caminar y correr. La infancia tiene una finalidad y para que la respetes, te comparto de qué se trata.
En ese sentido te invito a leer: Echa a perder a tus hijos: Que corran antes de caminar.
La utilidad de ser niños
La niñez es una etapa de desarrollo. No somos niños porque queramos serlo: lo somos porque lo necesitamos para crecer. Como todo dentro de la naturaleza, es parte de un proceso. La primera parte es descubrir el mundo, la segunda es aprender a funcionar en él, la tercera es salir a conquistarlo. Veámoslos en detalle:
1. Infancia
Del nacimiento y hasta los 6 años de edad, es lo que llamamos infancia. Ésta, en sí misma alberga dos categorías: la de infante, que es de 0 a 3 años y se caracteriza por su dependencia, descubrimiento y desarrollo de las capacidades básicas como lenguaje, movimiento, comunicación y desplazamiento.
La segunda categoría va de los 3 a los 6 años; los niños aún se encuentran dentro de la infancia, pero durante esta etapa se presenta el perfeccionamiento de todo lo que constituye la infancia temprana y el descubrimiento y aprovechamiento de su entorno. Los niños comienzan a ser más independientes y curiosos.
2. Niñez
La niñez comienza a partir de los 6 años y hasta los 12. El niño, además de independiente, es más capaz. Durante estos años comienza a convivir con sus pares, a asumir responsabilidades como estudiar y ser parte de la dinámica familiar. Descubrir sus derechos y sus obligaciones es otra característica de los niños en esta etapa.
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3. Adolescencia
La caótica adolescencia es también parte de la niñez, pero en su etapa última. Se caracteriza porque los niños comienzan a percibirse como individuos diferentes los demás, desarrollan ideales propios, crean una identidad y se interesan por el futuro. Su razonamiento se hace más crítico e intuitivo.
Este período puede durar hasta alrededor de los veinte años, aunque lo cierto es que ninguna de estas etapas tiene rangos de edad rígidos y exactos. Dependen en gran medida de las características de cada familia y cada persona, su salud, su entorno social, su educación, entre otros.
La próxima vez que quieras que tu hijo crezca más de prisa, detente a pensar en las implicaciones que acelerar esa etapa puede tener para su vida a futuro. Ser niños no es estar sin hacer nada, solo que a diferencia de los adultos que ven en “hacer” un beneficio material, el de los niños es físico y psicológico. Sé útil y déjalos vivir su infancia.
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